La fundición a presión de aluminio es un proceso de fabricación versátil que se utiliza para producir componentes metálicos de precisión con alta precisión dimensional y diseños complejos. Este proceso implica inyectar líquido Aluminio en un molde diseñado a medida. , permitiendo que el metal se solidifique y tome la forma de la cavidad del molde.
Los ingenieros utilizan software de diseño asistido por computadora (CAD) para crear un modelo 3D detallado de la pieza.
Las consideraciones incluyen el espesor de la pared, los ángulos de salida y cualquier socavado requerido.
El molde suele estar hecho de acero para herramientas de alta calidad para mayor durabilidad.
El diseño del molde incluye la línea de separación, el sistema de compuertas y cualquier guía o núcleo necesario para funciones complejas.
La máquina de fundición a presión está equipada con el molde y el molde se cierra de forma segura.
Se aplican lubricantes para facilitar el proceso de expulsión.
Se eligen aleaciones de aluminio con puntos de fusión y fluidez específicos.
El metal fundido se inyecta a alta presión (hasta 2000 bar) para llenar completamente la cavidad del molde.
El molde tiene canales de enfriamiento estratégicamente ubicados para regular la temperatura y promover una solidificación uniforme.
El tiempo de enfriamiento se optimiza para ciclos de producción eficientes.
Los pasadores eyectores, operados por la máquina, empujan la pieza fundida fuera del molde.
Se emplean métodos de extracción automáticos o manuales según la complejidad de la pieza y del molde.
El exceso de material, conocido como rebaba, se elimina utilizando herramientas de recorte.
Se aplican procesos adicionales de mecanizado o acabado, como el granallado, para mejorar la superficie.
El diseño de moldes incluye la creación de planos detallados para el núcleo y la cavidad del molde.
Las consideraciones sobre los sistemas de compuerta, ventilación y enfriamiento son fundamentales para una fundición exitosa.
Los aceros para herramientas para trabajo en caliente como el H13 son comunes para moldes de alta producción debido a su resistencia al calor.
Los moldes de aluminio son adecuados para tiradas de producción más cortas y ofrecen una disipación de calor más rápida.
El mecanizado CNC implica fresado y/o mecanizado por descarga eléctrica (EDM) para lograr las formas intrincadas del molde.
Se mantienen tolerancias estrictas para garantizar la precisión de las piezas.
Los aceros para herramientas se someten a procesos de tratamiento térmico como templado y revenido para obtener dureza y tenacidad.
El control preciso de las temperaturas durante el tratamiento térmico es crucial.
Las superficies del molde se pulen o texturizan para lograr el acabado deseado en la pieza fundida.
Se pueden aplicar recubrimientos como cromo o nitruración para aumentar la resistencia al desgaste.
Los componentes del molde, como el núcleo y la cavidad, se ensamblan y aseguran.
Las pruebas implican verificar la alineación, sujeción y funcionalidad adecuadas de las piezas móviles.
El mantenimiento de rutina implica limpieza, lubricación e inspección de desgaste.
Cualquier componente dañado o desgastado se repara o reemplaza para garantizar una calidad constante.